viernes, 2 de mayo de 2008

No es lo mismo

Hoy sigue habiendo quien se empeña en asegurar que Ciudadanos y el partido de R.Díez son lo mismo. Gemelos idénticos, vamos. A estas alturas, podría parecer que el mundo ya debería haber percibido las diferencias, que no son pocas, tal y como los de la R. Díez se empeñaron en demostrar tras su anuncio de que en ningún caso se unirían a Cs para concurrir a las generales. Tenían que medir sus fuerzas, aseguraron. Su marca debía ser testada, explicaron. Y Cs era otra cosa, un partido empeñado en huir de la transversalidad, la gran divina. Parece cuando menos paradójico que precisamente personas situadas claramente a la izquierda sean las que con más ardor estén defendiendo "la unión". Aquellos que no se sentían cómodos en la transversalidad ahora claman por la fusión. Y otra vez vuelta a los orígines de la indefinición ideológica, ¡claro!

En política parece que todo vale. Vale incluso la falta de democracia interna. Se dice que hay que predicar con el ejemplo, pero no. Para los de la R. Díez no. Parecen pensar algo así como: "que sí que yo soy más demócrata que nadie, pero es que ahora no me va bien ser democrático, ahora esto no toca, así que haré el congreso dentro de un par de añitos aprox y de elecciones internas territoriales, nanai, menuda pereza". Ya lo decía Pujol, "aixó ara no toca".

A fuerza de decir que Cs y Up son lo mismo, alguien incluso puede creérselo. Cada vez que se repite esa idea en los medios, perdemos más de un votante en Cataluña. Votantes que nunca votarían el estilo de Up, de bandera como sayo, y sí el de Cs, promotor genuino (aunque después otros como Up se lo apropien), de "los derechos no son de los territorios, sino de las personas" o, lo que es lo mismo, "sólo nos importan las personas".

2 comentarios:

Unknown dijo...

si en tu propio blog y en tu propia encuesta tienes más de un 25% que no comparte lo que dices, mejor dedicate a otra cosa.
Efectivamente no son lo mismo, pero no por lo que dices

Pepa dijo...

Verás, aquí puede entrar cualquiera y expresar su opinión en libertad. Prueba de ello es la encuesta. ¿Cuántos blogueros se atreven a ello? No pretendo convencer al 100% de la humanidad, pero mi opinión vale tanto como la tuya. Si no te interesa lo que cuento, no entres y punto, majo.